Después de la masacre al movimiento estudiantil-polular el 2 de octubre de 1968 por parte del Estado burgués mexicano, el movimiento estudiantil buscó reorganizarse y salió a las calles el 10 de junio de 1971 para solidarizarse con la lucha de los estudiantes de la Universidad de Nuevo León.
En esa marcha del 10 de junio los estudiantes fueron brutalmente reprimidos por el grupo paramilitar “Los Halcones”. Pero es importante recordar que no sólo los estudiantes sufrieron la represión, también fueron reprimidos los ferrocarrileros y la sección 9 del magisterio democrático en 1958-59, los campesinos que luchaban por su tierra, las luchas sindicales de la insurgencia obrera -incluida nuestra organización sindical el 7 de junio de 1977- y las organizaciones revolucionarias que luchaban por una sociedad más justa.
Los responsables de esas represiones siguen sin ser castigados, por lo que los trabajadores seguimos gritando “Ni perdón, ni olvido; castigo a los asesinos”.
Fotografía: Marcha del 10 de junio de 1971. Archivo Paco Ignacio Taibo II.
